Su propósito es estudiar la actividad eléctrica cerebral en una persona despierta y en reposo. Para ello se colocan sobre el cuero cabelludo pequeños discos metálicos llamados electrodos, que registran el voltaje producido en la corteza cerebral. La información obtenida simultáneamente de todos ellos se procesa en un computador que grafica en la pantalla del computador varias líneas que representan la diferencia de voltaje versus tiempo en las distintas áreas del cerebro. Es un examen que entrega valiosa información acerca de muchas condiciones neurológicas tales como las epilepsias, tumores cerebrales, demencias, accidentes cerebrovasculares, trastornos del sueño y otras patologías.

Es un examen no invasivo, indoloro, que dura alrededor de 30 minutos y se realiza con la persona despierta y acostada sobre una camilla.  Los electrodos se adhieren sobre el cuero cabelludo con un gel de base acuosa. No se administran fármacos. La persona debe permanecer relajada con los ojos cerrados y luego de un rato se le pide que comience a respirar hondo durante 3 a 5 minutos para registrar los cambios que ocurren. Es normal sentir un ligero mareo o cosquilleo en las manos o boca. Luego la persona descansa. Luego se ubica frente a la cara del paciente un tipo de lámpara que se enciende y apaga rítmicamente por unos minutos, siempre con los ojos cerrados. El examen termina y la persona puede retirarse. No es necesario lavarse el pelo inmediatamente. El gel puede removerse fácilmente con agua tibia en su domicilio

Indicaciones para Acudir al examen

Electroencefalograma Estándar en Adultos:

• Asistir con el pelo limpio, seco, lavado solo con champú (sin bálsamo ni acondicionadores)
• Si lo desea, puede traer toalla, champú y peineta (para lavarse el pelo al finalizar examen)
• Traer Electroencefalogramas anteriores (si los tiene)
• Anotar el nombre de todos los medicamentos que toma.

Electroencefalogramacon Privación de Sueño:

• Asistir con el pelo limpio, seco, lavado solo con champú (sin bálsamo ni acondicionadores)
• Puede traer toalla, champú y peineta (para lavarse el pelo al finalizar el examen)
• Traer Electroencefalogramas anteriores (si los tiene)
• Anotar el nombre de todos los medicamentos que toma
• Debe venir con acompañante
• No dormir durante las 24 horas previas al examen (levantarse el día anterior y estar todo el día y toda la noche SIN dormir).

Electroencefalograma con Privación Parcial de Sueño:

• Asistir con el pelo limpio, seco, lavado solo con champú (sin bálsamo ni acondicionadores)
• Puede traer toalla, champú y peineta (para lavarse el pelo al finalizar el examen)
• Traer Electroencefalogramas anteriores (si los tiene)
• Anotar el nombre de todos los medicamentos que toma
• Debe venir con acompañante
• Dormir desde las 02:00hrs. hasta las 05:00 hrs. No dormir en el trayecto

Electroencefalograma en Niños menores de 5 años:

• Asistir con el pelo limpio, seco, lavado solo con champú (sin bálsamo ni acondicionadores)
• Puede traer toalla, champú y peineta (para lavarse el pelo al finalizar el examen) o un gorro en caso de no hacerlo.
• Traer Electroencefalogramas anteriores (si los tiene)
• Anotar el nombre de todos los medicamentos que toma
• Debe venir con acompañante
• En caso de niños pequeños acostarlo lo más tarde posible, alrededor de las 01:00 hrs. AM, y levantarlo a las 05:00 hrs. AM. No debe dormir en el   trayecto. Traer mamadera o jugo, pañales, tuto, y cualquier cosa que lo ayude a dormir durante el examen.

Este examen se realiza con el fin de documentar lo que ocurre con la actividad eléctrica cerebral durante un evento clínico que queda grabado en formato de video digital. Ello permite estudiar condiciones de diagnóstico difícil como las crisis de epilepsia en niños y adultos, fenómenos motores que ocurren durante el sueño, pérdidas o alteraciones de conciencia de causa no precisada y para estudio en los casos de pacientes candidatos a cirugía de la epilepsia.

El examen se puede realizar en forma ambulatoria u hospitalizado, dependiendo de la gravedad del caso, del objetivo del examen y de cuán frecuentes son los episodios a investigar. En los casos sencillos, puede bastar sólo un par de horas, y en los más difíciles puede requerir de uno o varios días. El médico tratante es quien define el tiempo necesario para el procedimiento.

Al paciente se le instalan los electrodos habituales de un electroencefalograma, y generalmente algunos más adicionales, que se fijan con pequeños parches adhesivos y una malla elástica que cubre la cabeza para evitar que se suelten. Con una cámara digital se filma las actividades del paciente durante todo el examen, incluso durante el sueño. Los medicamentos que toma el paciente se dan en forma habitual.

La información obtenida en el examen se analiza y se entrega como un informe detallado de las características de los eventos ocurridos en el paciente. Es importante que tanto el paciente como sus familiares o testigos señalen si los eventos que presentó durante el examen son los mismos que sufrió antes.

Es el estudio funcional del sueño, cuyo fin es documentar los fenómenos que ocurren mientras se duerme. La persona debe acudir a una clínica de su elección para pasar una noche e irse de alta a la mañana siguiente. El examen busca grabar una noche habitual en el paciente, por lo que no se administran fármacos inductores del sueño.

No se requiere de preparación especial. El paciente debe llegar con un poco de sueño, por lo que debe evitar consumir café y dormir siesta. No es necesario suspender los medicamentos que habitualmente toma, salvo los antidepresivos y los inductores del sueño, en cuyo caso debe consultar con su médico tratante para que autorice la disminución y/o suspensión de éstos a lo menos una semana antes.

Una vez que el paciente es ingresado a la clínica, una tecnóloga especializada le colocará diversos sensores para medir funciones importantes durante el sueño: electroencefalografía, electrocardiografía, flujo aéreo nasal, movimientos respiratorios y de extremidades, saturación de oxígeno arterial, de posición corporal y de ronquidos. Los electrodos puestos en el cuero cabelludo se sujetan con una malla elástica para evitar su desprendimiento accidental durante la noche.

La polisomnografía dura 6 a 7 horas, durante las cuales la tecnóloga queda de turno vigilando que el examen quede bien grabado. Al final de éste, ella se encargará de retirar los electrodos y dispositivos que se hayan ocupado y el paciente podrá retirarse a su domicilio o su trabajo.

Este examen se practica en casos de sospecha de trastornos del sueño como el insomnio, el Síndrome de Apnea Obstructiva del Sueño, los ronquidos nocturnos, casos de somnolencia diurna excesiva y otros.  En los casos de Apnea Obstructiva del Sueño, si el médico lo solicita, se puede realizar la corrección de ésta con el dispositivo llamado C-PAP nasal, que básicamente es un aparato que insufla un flujo de aire ambiental a través de una mascarilla nasal con el fin de despejar la vía aérea y corregir la obstrucción y el ronquido. Aunque las personas pueden sentir una sensación de malestar o encierro transitorio con la mascarilla, rápidamente se adaptan y duermen normalmente, despertando por lo general, con la sensación de un sueño muy confortable y reparador.

Se trata de un examen que busca objetivar el grado de somnolencia que sufre el paciente. Para ello se practican 4 exámenes el mismo día, separados por 2 horas entre sí. Cada uno es muy similar a un electroencefalograma, con la diferencia de que lo que se busca es determinar cuánto se demora la persona en caer en somnolencia o sueño.

Es un examen que se solicita en el estudio de cuadros que se presentan con mucha somnolencia diurna, para el diagnóstico de narcolepsia y con fines de investigación.

La persona debe asistir como se le pide para un electroencefalograma estándar, pero dispuesto a dormir (ver “INDICACIONES PARA ACUDIR AL EXAMEN”, en la sección ELECTROENCEFALOGRAMA DIGITAL). Se acostará en una camilla, la tecnóloga le colocará electrodos sobre el cuero cabelludo y cerca de los ojos y luego le indicará que cierre los ojos y trate de dormir. El examen comienza cuando la luz de la habitación se apaga y termina a los 20 minutos si el paciente no se ha dormido, o 15 minutos después del inicio del sueño.

Entre cada examen, la persona debe evitar tomar café, bebidas cola, fumar o dormir, ya que se retrasará el inicio del sueño.

El resultado del examen corresponde al promedio del tiempo que se demora la persona en dormir las 4 siestas. Lo normal es un promedio de más de 10 minutos. Bajo 8 minutos representa un grado de somnolencia diurna anormal.

Además de la latencia en dormir, durante el examen se registran las etapas del sueño. Por ejemplo, si ocurre una etapa llamada REM (que representa la actividad onírica del sueño) en 2 o más siestas, este resultado apoya muy fuertemente el diagnóstico de Narcolepsia. Habitualmente, sin embargo, las etapas que se registran corresponden a las más superficiales, es decir I y II del sueño No REM, que son normales.